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Al igual que la mayoría de los comportamientos, ser pacientes tiene relación con aprender a regular nuestros sentimientos. Los niños deben saber que no siempre pueden tener lo que quieren exactamente cuando lo desean. Podemos explicarles que entendemos cómo se sienten frente a una situación de “espera”, para luego hablarles sobre la importancia de practicar la paciencia día a día.
Recorriendo estas páginas encontrarás distintas formas para trabajar con los niños el gran desafío que significa para ellos ser pacientes. Por ejemplo, incorporando turnos en las actividades cotidianas o jugando a ver quién dura más antes de morder un sándwich.
Este libro interactivo es ideal para que padres y cuidadores enseñen a los más chicos el valor de la paciencia. Las explicaciones, sugerencias y consejos de la Dra. Janet Rose, especialista en primera infancia, proporcionarán a los adultos orientación adicional clara y concisa sobre el tema.
A esta misma colección pertenecen los libros A veces estoy preocupado, Puedo pedir perdón y Puedo ser Paciente, también publicados por editorial Contrapunto.
Características:
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